Esta semana exploramos la relación de la columna con la idea de eje en el cuerpo. Es otra de las exploraciones esenciales de los “fundamentals” de Bartenieff. Aquí en la imagen es el número 3 (head-tail).
Una de mis reflexiones principales tiene que ver con la imagen mental que tenemos con la idea de “eje”, y con la necesidad de entender la columna en toda su capacidad de movimiento y flexibilidad.
La columna tiene una capacidad de articularnos absolutamente dinámica, lo sabemos: todas las flexiones entre vértebras, la rotación, la extensión en tantas variaciones de dirección que el juego de movimiento es virtualmente infinito. En cambio, me topo con una imagen mental de eje como una línea más o menos “rígida”.
Parte de mi trabajo personal cuando me muevo es recordar esta aparente oposición, ayudar a experimentar el eje interno como algo mucho más flexible y dinámico. Sí, nos interesa extender la idea de eje por todo el cuerpo, llevarlo más allá del atlas y más allá del coccis, pero también es importante pensar en el eje —en la alineación de mi estructura— como algo que se mantiene conectado con mi movimiento, que no se pierde cuando experimento con mi forma de manera creativa y salgo de la verticalidad.